Uno de los mayores puntos débiles del iPhone es su batería. Tal y cómo sucede con la batería del iPod, no es extraíble, lo que significa que con el tiempo se consume y debe ser reemplazada.
Se dice que tras dos años de uso, la batería del iPhone queda totalmente inservible. En cambio, Apple estima que la batería del iPhone empieza a perder capacidad (en torno al 20 por ciento) después de 300 o 400 ciclos completos de carga y descarga.
Sin embargo, los informes de seguimiento de la empresa comenzaron afirmando que 300 o 400 recargas se traducían en el agotamiento completo de la batería.